miércoles, 14 de octubre de 2009

PREMIO NOBEL DE ECONOMÍA PARA INVESTIGACIÓN SOBRE AUTOGESTIÓN Y RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS

La academia premió a los estadounidenses por estudios de gestión de recursos comunes. Williamson, reconocido por analizar la solución de conflictos en grandes empresas

Dos economistas que se especializaron en la comprensión del comportamiento y de las transacciones que no están comprendidos en contratos detallados o en una legislación recibieron ayer el Premio Nobel de Economía 2009.

Elinor Ostrom, profesora de la Universidad de Indiana, fue galardonada por su trabajo en gestión de recursos comunes como las reserva de peces.

El profesor Oliver Williamson de la Universidad de California también fue distinguido por su investigación complementaria, pero independiente, sobre cooperación y conflicto dentro de las compañías. Ambos ganadores compartirán el premio de u$s 1,4 millones. El galardón de Economía se entrega todos los años desde 1969 en memoria de Alfred Nobel y esta es la primera vez que lo recibe una mujer.

La profesora Ostrom contó que su primera reacción fue de “gran sorpresa y agradecimiento” y agregó: “Hay mucha gente que ha trabajado mucho y haber sido elegida para este premio es un gran honor.”

En un año en que mucha gente podría pensar que los economías no se merecen ningún tipo de reconocimiento, el Nobel fue para una rama de la economía que no está relacionada con la crisis financiera y probablemente no genere la misma polémica que la distinción otorgada el año pasado a Paul Krugman de Universidad de Princeton, un macroeconomista que hacía comentarios sobre la crisis económica mundial desde una perspectiva keynesiana.

Los dos economistas recibieron su galardón por haber estudiado cómo exigir el cumplimiento de normas cuando no existen contratos detallados o marcos legales. Esta investigación ayuda a comprender porqué los recursos naturales no siempre son degradados, al contrario de teorías más simples, y porqué existen las grandes compañías, pero también tercerizan algunas operaciones.

La profesora Ostrom puso en duda la convencional teoría de la “tragedia de los comunes”, con el argumento de que las sociedades y los grupos regularmente crean normas y mecanismos de cumplimiento que detienen la degradación de la naturaleza. La teoría tradicional sostiene que la contaminación y el agotamiento de los recursos se producirán porque los individuos no reconocieron su efecto sobre otros. Sin embargo, ella asegura que la gente podría administrar los recursos bastante bien sin que las autoridades impongan reglas, siempre que las normas evolucionen con el tiempo, que los derechos sean claros, que existan las medidas para resolución de conflictos y que el deber de los individuos de mantener el recurso común tenga proporción con los beneficios de explotarlo.

Williamson de la Universidad de California también estudió la organización económica, pero dentro de las compañías. Dado que gran parte de la vida económica se produce dentro de organizaciones, él estudió el proceso de toma de decisiones, y no simplemente la decisión tomada. Eso lo ayudó a desarrollar una teoría de porqué existen las compañías, y que pueden ser eficientes para resolver conflictos mediante el uso de jerarquías.

También descubrió que cuando las transacciones son complejas, las empresas son más eficientes que los contratos individuales. La teoría ayuda a explicar las cambiantes fronteras de las compañías; porqué a menudo abusan de su poder; y porqué las grandes empresas de desarrollan en determinadas industrias.

Mujeres galardonadas

Elinor Ostrom es la quinta mujer laureada con el Nobel este año, con lo que se superó el anterior récord de tres ganadoras registrado en 2004.

Además de la profesora Ostrom, este año fueron distinguidas Elizabeth Blackburn y Carol Greider en medicina; Ada Yonath en química; y Herta Müller en literatura.

Con las cinco nuevas galardonadas, la cantidad total de mujeres que han obtenido alguno de los seis Premios Nobel asciende a cuarenta, una cifra magra comparada con los 762 hombres laureados. Si bien Marie Curie ganó las distinciones de física y química en 1903 y 1911 respectivamente, los Nobeles siguieron siendo prácticamente un terreno exclusivamente masculino hasta después de la Segunda Guerra Mundial.

Desde entonces, va gradualmente creciendo la cantidad de mujeres que son laureadas en literatura, paz y medicina. Pero los dos campos en que ganó Curie siguen dominados aún por los varones.
Información enviada por Leticia G.V.