sábado, 4 de enero de 2020

Epifanía del Señor

En la Epifanía del Señor se reveló al Mundo Entero:
 la LUZ, la GLORIA, la VERDAD, el CAMINO y la VIDA 
en ABUNDANCIA que proviene de nuestro Salvador, el Mesías, Enmanuel...
Dios en medio de nosotros: Jesucristo.
Que nuestra vida sea una alabanza a Dios, 
una vida de servicio a nuestros hermanos para la gloria de Dios.
Y lo más  hermoso y admirable de Nuestro Señor Jesucristo: 
Sus palabras de gracia...
la ternura infinita de Dios encarnada en un bebé..
y su infinita misericordia. 
Y nos enseñó a orar primero dar gracias a Dios, hacer la petición y si es para nuestro bien
y conforme a la Voluntad Divina... llegan los MILAGROS!  
Bendecir, bendecir, bendecir siempre
Gracias Señor por tus abundantes bendiciones.
Levántate y sonríe, Jerusalén, que ya llega tu luz,

y brilla en ti la gloria del Señor.

Aunque cubran la tierra las tinieblas 

y la noche envuelva a las naciones, 

el Señor irradia sobre ti su luz, y su gloria se revela en ti.

A tu luz acudirán los pueblos,

los reyes buscarán el brillo de tu aurora.

Alza la vista y mira alrededor cuántos vienen en tropel hacia ti.

Son tus hijos que llegan desde lejos, a tus hijas las traen en brazos.

Al verlos, te pondrás radiante de alegría.

Y se conmoverá y ensanchará tu corazón, 

cuando lleguen a tus manos los tesoros del mar, 

y te traigan las riquezas de los pueblos.

Te inundarán caravanas de camellos,

de dromedarios de Madián y de Efá.

Vendrán multitudes de Sabá,

cargadas de oro y de incienso, 

y proclamando las alabanzas del Señor.

Isaías 60, 1 - 6